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¿Llegará a más la atracción entre una joven peluquera y un gestor de inversiones mayor que ella que trabajan en el mismo edificio?
Heather.
No puedo evitar fijarme en el Sr. Alto, Rubio y Guapísimo cada vez que paso por su lado de camino a recoger el almuerzo, pero ¿por qué iba alguien como él a fijarse en mí? Aparte de las mechas azules de mi pelo. Aun así, una chica puede soñar. Cuando me encuentro sola por la noche y con una rueda pinchada, me sorprendo cuando él se ofrece a ayudarme y se arrodilla con su caro traje. Quizá haya una oportunidad para un cuento de hadas moderno.
Christopher
Después de mi divorcio, me he sentido sola, lo admito. No es divertido volver a una casa vacía en la que se supone que debería haber una familia. La dulce estilista de al lado despierta en mí sentimientos que no había sentido antes. Cuando compartimos un encuentro lleno de pasión, me quedo pensando cómo puedo convertir lo nuestro en algo para toda la vida.
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¿Hará la pérdida de un amigo que un hombre mayor se dé cuenta de que no es demasiado tarde para volver a encontrar el amor?
Gretchen.
Mi vida es buena. Tengo una mejor amiga increíble y un trabajo estupendo como profesora de preescolar. Lo único que me falta es esa persona especial.
Lástima que ya lo haya encontrado y que, como padre de mi mejor amiga, esté fuera de mis límites. Cuando surge una oportunidad de ayudarlo, no puedo decir que no y soy lo suficientemente egoísta como para admitir que quiero estar cerca de él, aunque sea por unos días.
Nick.
Tras obtener la custodia de mi hija, me dediqué a criarla y a construir mi negocio. Verla convertirse en una joven fuerte e independiente es el sueño de todo padre. Pero no esperaba ver cómo su mejor amiga pasaba de ser una adolescente monísima a una mujer guapa y cariñosa que me hace desear cosas que no tengo por qué desear. Cuando pierdo a mi mejor amiga, me pregunto si no está tan mal ir tras lo que yo quiero.
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