1º HER FATED MATE
Alexis.
Yo era una loba sin futuro.
Estaba acostumbrada a ser la «invisible» de mi manada, débil y pobre.
Atrapada en este lugar que me ignoraba y perseguida por el recuerdo del vampiro que mató a mis padres, estaba desesperada por huir.
Después de todo, no tenía nada que perder.
Pero con la horda de vampiros tras mi pista, me salvó un hombre misterioso y melancólico.
Wilhelm Grimm, el heroico alfa desaparecido hace setenta años.
Pensé que ya había sufrido bastante y que él sería mi redención.
Resultó que yo no sabía nada de desamor...
Will.
La inmortalidad era una maldición.
Todo lo que una vez fue mío había sido borrado por el tiempo: mi manada ahora la lideraba otro alfa, había vampiros campando a sus anchas por mi territorio, y la mujer que amaba llevaba muerta desde hacía tiempo.
Pero, nada podría compararse a emparejarme con la nieta de mi amante.
La rechacé sin piedad. Tenía que hacerlo.
No sólo porque los tortuosos experimentos me habían transformado en un monstruo retorcido...
2º FATED TO THE ALPHA
Mi maldición destruyó mi perfecta vida en Chicago y me arrojó a los lobos.
Me obligó a rechazar a mi compañero predestinado.
Podía ver el futuro, pero lo único que había visto era la muerte.
Cuando me mudé a Rapid Falls, era mi oportunidad de volver a ser una chica normal. Pero al cabo de una semana, una noche, me perseguía una manada de hombres lobo asesinos.
Hasta que Brandon me salvó.
Él era perfecto en todos los sentidos, pero era un hombre lobo.
Según él, yo también.
Empezaba a enamorarme de Brandon cuando lo vi muerto. Para ahorrarme la pena, lo rechacé.
Sin embargo, arriesgó su vida y me salvó por segunda vez, por lo que no pude resistir más mi deseo.
Luché por encontrar mi camino en este nuevo mundo en el que los lobos eran a la vez depredadores y presas.
Un mundo en el que Brandon iba a morir pronto.
¿Seré capaz de dominar mi maldición y aceptar mi destino?
3º FALLING FOR HIS MATE
Lo amaba, pero tuve que rechazar a mi compañero predestinado porque la discordia del clan se opuso a que estuviéramos juntos.
Me dolió mucho.
Inesperadamente, cuatro lobos de mi clan desaparecieron sin motivo.
Podría haber sido el comienzo de una guerra que siempre se ha estado gestando entre mi clan y el suyo, pero ambos fuimos atacados.
Teníamos el mismo enemigo.
Era hora de dejar a un lado nuestras diferencias y trabajar juntos. Sólo había una manera de hacerlo.
A través de una pareja predestinada.
Y debíamos dejar a un lado el amor y luchar por nuestra supervivencia con sangre, gruñidos y entusiasmo.
El destino de los dos clanes pendía precariamente de nuestros hombros.
Partimos como salvadores, pero un traidor entre nosotros
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