Una historia de amor épica ambientada en la brillante y salvaje esfera del patinaje artístico de élite, protagonizada por una mujer decidida a forjar su propio camino dentro y fuera del hielo.
Puede que no tenga un nombre famoso, financiación o el apoyo de su familia, pero Katarina Shaw siempre ha sabido que estaba destinada a convertirse en patinadora olímpica. Cuando conoce a Heath Rocha, un chico solitario atrapado en el sistema de acogida, su conexión instantánea los convierte en un dúo formidable sobre el hielo. Aferrándose al patinaje (y el uno al otro) para escapar de sus vidas turbulentas, Kat y Heath pasan de ser novios de la infancia a campeones de patinaje sobre hielo, cautivando al mundo con su química abrasadora, su estilo rebelde y su relación de montaña rusa.
Hasta que un impactante incidente en los Juegos Olímpicos pone fin repentinamente a su relación.
A medida que se acerca el décimo aniversario de su último viaje por el patinaje, un documental no autorizado reaviva la obsesión pública con Shaw y Rocha, que afirma descubrir la «historia real» a través de entrevistas con sus amigos más cercanos y sus rivales más acérrimos. Kat no quiere tener nada que ver con el documental, pero no soporta la idea de que otra persona defina su legado. Así que, después de una década de silencio, cuenta su historia: desde las tragedias de la infancia que crearon su vínculo absorbente con Heath hasta el choque de deseos que los separó. Rumores sensacionalistas han perseguido cada uno de sus pasos durante años, pero la verdad puede ser incluso más impactante que los titulares.
Hoy es el décimo aniversario del peor día de mi vida.
Como si pudiera olvidarlo, cuando millones de desconocidos se han empeñado en recordármelo. Seguro que ya has visto las noticias, las portadas de las revistas y las publicaciones en las redes sociales. Quizá estés pensando en acurrucarte en el sofá esta noche con un bol de palomitas y ponerte la serie documental que se ha estrenado para conmemorar la ocasión. Satisfacción malévola y relax.
Adelante. Disfruta del espectáculo. Pero no te engañes pensando que me conoces. A estas alturas, lo he oído todo: Katarina Shaw es una perra, una diva, una mala perdedora, una mentirosa manipuladora. De sangre fría, una tramposa, una criminal. Una zorra que busca atención, una zorra de verdad. Incluso una asesina.
Llámame como quieras. Ya me importa un bledo. Mi historia es mía, y la contaré de la misma forma que patiné: a mi manera, con mis propios términos.
Veremos quién gana al final.
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